LA PEQUEÑA MISA SOLEMNE
Último pecado de vejez
El título es como Santillana del Mar, que ni es santa, ni llana, ni tiene mar...
Napoleón III dijo de esta misa que ni es pequeña, ni solemne, ni particularmente litúrgica.
No obstante, el adjetivo pequeña se lo puso Rossini por la mínima orquestación de la versión original: dos pianos, armonio y doce cantantes que representan a los doce apóstoles (los cuatro solistas y ocho voces más. Los solistas también debían cantar las partes corales...) El editor fue quien añadió Solemne al título.
Cinco años antes de su muerte, en 1863, escribe esta misa de la que dijo lo siguiente: Todas mis composiciones son escenas y ésta es la última de todas.
En la partitura realizó la siguiente anotación: Buen Dios, aunque he tratado de escribirte esta música sacra, ya sabes que yo nací para la ópera cómica. Un poco de ciencia, un poco de corazón, eso es todo lo que soy capaz de ofrecer. Así que te ruego que la bendigas y me garantices el paraíso.
La versión original estaba pensada para interpretarse en lugares pequeños y ambientes privados, pero también realizó una orquestación para poder interpretarla públicamente.